Hace unos minutos, el autobús del equipo del Bayern de Múnich llegó al Allianz Arena en medio del frenesí de la afición.
No hay duda de que hoy nos espera una semifinal de Liga de Campeones realmente apasionante. Si bien es cierto que no hay que subestimar al Borussia Dortmund y al Paris Saint-Germain por el otro lado, la realidad es que en este partido estamos hablando de un auténtico clásico europeo. La afición bávara también celebró al ver que Los Merengues habían ganado al Manchester City y que ellos eran el próximo rival. El gran Miguel Quintana dijo que ambos clubes se ven y se conocen y sí, eso está claro. Son los dos gigantes del Viejo Mundo.
Ahora, todos los fanáticos de Red saben que el juego de hoy es la clave para determinar el resultado general, incluidos ambos juegos. Acabar en el Bernabéu es una tarea que ningún equipo quiere hacer, por eso hoy los de Tuchel sabían que no les quedaba más remedio que ganar e irse a jugar a España. Hoy todo el mundo sabe que es todo o nada.
